DEMOCRACIA Y MAYORÍA SOCIAL
3 de Noviembre de 2016
Hoy más que nunca se ponen entre dicho principios y valores que parecía que nos habíamos otorgados todos, en vía a una paz social mayoritaria, que busque el bien común, y anclada en lo que llamamos discutiblemente la sociedad del bien estar.
Pero ya desde hace algunos años el pensamiento ideológico predominante intenta imponerse como una ideología única que viene a desbancar a otras a las que se les acusa de trasnochadas. En el fondo no es más que la vuelta a los pensamientos más radicales del fascismo y el comunismo, y esto a su vez disfrazado de relativismo moral.
El ser humano entendido como un súper hombre que juega a decidir y hacer como si fuera el dueño de todo, y además queriendo imponer el pensamiento.
Los populismos se quieren apropiar de la calle como si esta fuera suya, haciendo ruido, aludiendo que ellos son el pueblo, una minoría que grita y hace ruido, mientras una mayoría más civilizada se queda en casa y confían en el Estado de Derecho, en no cambiar las cosas a empujones y saltándose la ley.
Para al movimiento ideológico único no estamos en democracia, la democracia son ellos y su pensamiento, aunque sean menos, se apropian de la verdad, y además se hacen llamar mayoría social, cuando no lo son, y ¿Por qué se adueñan de la calle, y de la gente? ¿Por qué se creen con mayor autoridad moral?
Imposición, populismo, saltarse la Ley, escraches, mayoría social, la gente, la no representación de la democracia, el boicot a las instituciones, la persecución y la coacción son las armas de esta ideología impositiva denominada por ellos mismos “mayoría social” cuando no lo son, y dispuestos a hacer la vida imposible cuando los resultados electorales no son los que a ellos les interesa.
Javier Abad Chismol